Los beneficios de realizar una cirugía de mínima invasión

El término de CIRUGIA MÌNIMAMENTE INVASIVA fue utilizado por 1a vez por John Wickham a finales del siglo XIX, de esa fecha a la actualidad han ocurrido múltiples avances tecnológicos que nos permiten realizar un procedimiento quirúrgico con el menor trauma posible.

La cirugía de mínima invasion a «grosso modo» consiste en realizar una intervención por medio de Puertas de entrada de pequeño tamaño, debemos de crear cavidades reales por medio de la insuflaron con gas o tracción de los tejidos y también debemos de tener una visualización de campo operatorio por medio de ópticas conectadas a monitores.

Los beneficios reales de una cirugía de mínima invasión sea de la especialidad de que sea no solo se encuentran en el punto de vista cosmético. Por medio de una cirugia de mínima invasión podemos lograr los mismo resultados que con la cirugía abierta o tradicional, teniendo como efecto también una recuperación mucho mas rápida, con menor dolor y por ende menor necesidad de medicamentos analgésicos. Se ha comprobado que existe menor riesgo de infecciones en la herida y también la posibilidad de un internamiento mucho mas corto.

¿Existe alguna limitante o contraindicación para realizar una cirugía por mínima invasión o en nuestro caso por laparoscopía?

Una contraindicación absoluta sería que nuestro paciente no estuviera en condiciones de tolerar una cirugía mayor o que estuviera inestable hemodinamicamente (fallas en corazón, pulmones u otro órgano vital). Fuera de lo anterior, los objetivos y resultados de nuestra cirugía nuevamente, DEBEN DE SER LOS MISMOS comparados con la cirugía abierta.

En conclusión, los beneficios de una cirugía de mínima invasión son muchos: menores costos en cuanto a estancia en el hospital, menores costos en cuanto a gasto en analgesicos, mejores resultados cosméticos pero sobre todo, que nuestro paciente tiene una recuperación mucha mas rápida y puede reincorporarse a su vida normal de manera mas pronta